miércoles, 19 de diciembre de 2012

El impacto de esta investigación en el desarrollo cognitivo del alumno


El impacto de esta investigación en el desarrollo cognitivo del alumno


 

Si se logra tener una aproximación al nivel de conocimientos previos que poseen los alumnos de educación superior y al uso que hacen de él para la compresión de textos científicos, la investigación podría ayudar al alumno a tener un mejor acercamiento a dichos textos en caso que lo requiera, para mejorar su comprensión y su desempeño académico.

Para explicar el posible impacto que esta investigación tendría en el desarrollo cognitivo del alumno es necesario partir de una teoría o un modelo teórico. Por lo que dicho tema se desarrolla desde el modelo teórico constructivista.

Antes de continuar sería bueno señalar (interpretando a Woolfolk) que desde un enfoque epistemológico se podría hablar de dos tipos de corrientes para explicar cómo aprende el alumno. De manera general existen dos corrientes constructivistas; a) los constructivistas psicológicos, y b) los constructivistas sociales (Woolfolk, 2010; 311). Ambas perspectivas consideran que “los aprendices desarrollan activamente su conocimiento, la diferencia estriba en que la primera “…se enfoca en la manera que los individuos usan la información, los recursos e incluso la ayuda de los demás para crear y mejorar sus modelos mentales y estrategias de solución de problemas”. (Woolfolk, 2010; 311). Se trata de un aprendizaje individualizado, es una manera de usar la información entrante nueva y ponerla a disposición de la ya conocida para reelaborarla, mejorar, construir un conocimiento más avanzado y mejor. Naturalmente eso será posible si a la información nueva le encuentra alguna relación con sus conocimientos previos, es decir, sentido. Por otro lado los segundos “… no se enfocan en el aprendizaje individual… más bien se interesan en la manera en que se construye el conocimiento público”.  (Woolfolk, 2010; 311-312). Desde este enfoque las relaciones de alumno profesor, alumno alumno, alumno y sus padres, alumno y amistades, etc. es decir las relaciones sociales son las que demanda el interés y la importancia de cómo los individuos construyen el conocimiento.

De esta manera el los conocimientos previos para la comprensión de textos científicos en los alumnos tendría dos impactos el individual y el social. Sin embargo en esta oportunidad sólo nos referiremos al impacto de cognoscitivo individual, de una manera breve.

 

El impacto individual:

De acuerdo con García (2006), mismo que interpreta a Piaget, el alumno posee esquemas que construye debido a una respuesta a la información que obtiene del exterior y que posteriormente lo relaciona con otros esquemas para alcanzar el equilibrio y así construir una estructura nueva. García (2006; 39-40). De acuerdo con este supuesto, el alumno construye conocimiento si logra desarrollar una relación entre la información que recibe del exterior con la que ya posee. Por tanto si el alumno puede encontrar una relación de la información que los textos científicos tienen con los conocimientos previos que éste posee lograra construir una nueva estructura de conocimiento.

Hernández, también hace mención de este cambio interno que sucede en el individuo debido a la reorganización cognitiva que es capaz de hacer: “… el sujeto posee una organización interna de eventos que va reelaborando en función de los intercambios  con el exterior y a partir de esta reorganización interna (estructuras, esquemas…) el sujeto interpreta y otorga nuevos significados a la realidad”. (Hernández, 2002; 134). Si la institución educativa o el docente no es capaz de brindar al alumno textos científicos que dé ante mano hayan sido estructurados teniendo en cuenta el tipo de alumno y su nivel de conocimientos en relación a dichos textos, su pretensión de que el alumno aprenda de manera significativa se verá frustrada.    

Una implicación interesante desde esta perspectiva de la construcción del aprendizaje es que el alumno debe participar activamente en el proceso de su aprendizaje, sin embargo, tal y como dice Tovar, no se debe exagerar:

“…es obvio que el estudiante debe tener un papel muy activo en el salón de clases, superando el papel pasivo de recibir la materia ordenada y dirigida por el maestro. Pero es igualmente obvio que, dejar al joven la tarea de descubrir por si mismo las bases que no tiene, resulta una tarea desproporcionada a su inmadura y limitada experiencia”. (Tovar, 2007; 56).

Si por un lado el constructivismo hace hincapié al papel principal del alumno en su papel activo en el proceso de aprendizaje, por el otro no le deja toda la responsabilidad a éste, sino que le concede bastante importancia al papel del docente.

Una forma positiva de impactar en el desarrollo cognitivo del alumno es lograr que desarrolle un aprendizaje significativo. Éste se hará evidente si el alumno es capaz de adquirir nuevos significados, tal como lo menciona Ausubel: “… [la] adquisición de significados nuevos; presupone una tendencia al aprendizaje significativo y una tarea de aprendizaje potencialmente significativa”. ”. (Ausubel, 1983; 538). Naturalmente con ya se vio, la posibilidad de que el alumno adquiera significados nuevos para dicho aprendizaje, dependerá mucho de la relación que pueda establecer entre la información nueva (la que se le presenta en los textos científicos) con los conocimientos previos que posee y de los cuales va a partir para construir los nuevos significados.

Otro autor que habla de aprendizaje significativo es Mayer, quien dice que: “… el aprendizaje significativo es el aprendizaje que conduce a la generalización”. (Mayer, 2004; 3). Para aclarar esta breve definición, Mayer considera que es importante explicar que se entiende por aprendizaje: “El aprendizaje [dice] se define como un cambio relativamente estable en el conocimiento de alguien como consecuencia de la experiencia de esa persona”. (Mayer, 2004; 3). Agrega también que dicha definición cuenta con tres partes:

 

  1. Permanente: cuando el aprendizaje perdura en la persona, es decir, es permanente (a largo plazo).
  2. Cambio: se trata de un cambio cognitivo que se refleja en un cambio de conducta.
  3. Basado sobre la experiencia: depende de la experiencia previa y personal del aprendiz.

 

El aprendizaje entendido como significativo va más allá de que el alumno repita, memorice, tenga o descubra algún tipo de información. Para que un aprendizaje sea significativo requiere de la realización de una modificación de nivel cognitivo y dicho aprendizaje se hará manifiesto en la forma de conducirse del individuo.

 

Pero Mayer agrega una cuarta condición para identificar el aprendizaje significativo, a saber dice, la transferencia. De modo que si alguien no es capaz de hacer uso de un conocimiento aprendido en un campo en otro, no se puede hablar de un aprendizaje significativo. El estudiante debe ser capaz de transferir su aprendizaje a nuevas circunstancias.

 

La transferencia es: “… es el efecto del conocimiento previo sobre uno nuevo o sobre la resolución de un problema”. (Mayer, 2004; 5). Es decir gracias a un conocimiento ya adquirido a través de una experiencia previa y a la familiarización de las relaciones que se pudieran encontrar en otras circunstancias el conocimiento previo puede ser adaptado e incluido en la realización de un nuevo conocimiento o de la resolución del nuevo problema.

De acuerdo con Ausubel existen dos tipos de aprendizaje, el de recepción o el de descubrimiento, y ambos pueden o no ser significativos y deben ser diferenciados según el tipo de proceso. Ambos aprendizajes se presentan en la siguiente tabla:

 

Por recepción significativo
Requiere que el material de información ya acabado que se le presenta al alumno sea comprendido al momento de interiorizarlo.
El propósito es que pueda adquirir significados nuevos y que pueda recuperarlos y darles uso en un futuro.
Por descubrimiento significativo
 
El contenido de lo que se va a aprender debe ser descubierto por el alumno.  Luego reordenar la información, reintegrarla con la estructura cognoscitiva y reorganizarla de manera que se produzca la relación y el nuevo aprendizaje.

 

Ahora bien, como se puede apreciar la condición para que el estudiante logre un aprendizaje significativo, ya sea por recepción o descubriendo, es que encuentre una relación con lo que él ya conoce. En efecto, Ausubel afirma que: “…hay aprendizaje significativo si la tarea de aprendizaje puede relacionarse, de modo no arbitrario y sustancial… con lo que le alumno ya sabe y si el alumno adopta la actitud correspondiente para hacerlo así”. (Ausubel, 1983; 37). Aquí entra otro factor importante para la construcción de un aprendizaje significativo y que tiene que ver directamente con el aprendiz, ya que dependerá de la actitud de este ante el aprendizaje. Por tanto no sólo depende del docente y de los contenidos que han de ser aprendidos. 

 

Entendido así, tanto la presentación del material, la forma en que el docente planea y lleva la clase como la actitud del alumno juegan un papel importante en el proceso de enseñanza y aprendizaje para conseguir que el alumno construya un aprendizaje significativo.  

 

 

 

FUENTES BIBLIOGRÁFICAS:

Anita Woolfolk (2010). “Constructivismo Cognoscitivo y Social” en Psicología Educativa. Ed. Pearson. Pp. 310-334.

 

David P. Ausubel, Joseph D. Novak y Helen Hanesian (1983).  Psicología Educativa: Un punto de vista cognoscitivo. Ed. Trillas. Pp. 538.

 

Enrique García González (2006). “Las estructuras” en La formación de la inteligencia. Ed. Trillas. Pp. 39-40.

 

Gerardo Hernández Rojas (2002). Paradigmas en Psicología de la educación. Capitulo 6. Descripción del paradigma cognitivo y sus aplicaciones e implicaciones educativas. Ed. Paidós. Pp. 117-167.

 

Rafael Manuel Tovar González (2007). Constructivismo Práctico en el Aula. Ed. Trillas. Pp. 56-57.

 

Richard E. Mayer (2004). Psicología de la educación. Enseñar para un aprendizaje significativo. Ed. Pearson. Pp. 1-50.

 

 

lunes, 3 de diciembre de 2012



LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS EN BÚSQUEDA DE LA CALIDAD
POR MEDIO DE LA EVALUACIÓN: UNA LUCHA PERMANENTE


Jorge F. Calderón V


En las últimas décadas las instituciones educativas se han visto presionadas por organizaciones mundiales que les exigen cumplir con ciertos parámetros de lo que llaman modelo de calidad, de no hacerlo así, no conseguirán su “patrocinio”, es decir recursos económicos. Por tanto, se han visto obligadas a entrar en el juego y adoptar un modelo que permita alcanzar los estándares de calidad exigidos.

El objetivo de este trabajo es presentar brevemente algunos conceptos que están relacionados en la búsqueda de las instituciones por la calidad educativa.

Conceptos fundamentales vistos durante el semestre: Modelo – Modelo de Calidad – Modelo de Evaluación -  Fin de la Evaluación – Programas de evaluación.
 
 
Modelo: se entiende como modelo una especie estructura o un plan elaborado de forma escrita cuyo objetivo es tener de manera anticipada un punto de referencia de lo que se quiere lograr. Por tanto intenta anticiparse a los problemas que pudieran surgir al momento de poner en marcha el plan. De preferencia el modelo debe de ser flexible a posibles cambios durante el proceso.

Hablando de las instituciones educativas ellas, para conseguir la finalidad de una educación de calidad, han de adaptar o construir un modelo de calidad que les permitan conseguir su propósito.

Modelo de calidad: es un modelo ideal. Es decir en teoría así debería ser el producto final, el que se quiere conseguir. Cuenta con ciertos objetivos, metas que de alcanzarse satisfacerían la demanda.     

Debido a las reformas en educación, los modelos de calidad suelen cambiar. Actualmente existen, por llamarlo de alguna manera, cuatro grandes indicadores de evaluación educativa del modelo de calidad: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a ser y aprender a convivir.

Modelo de Evaluación: hablar de modelo de calidad es necesariamente hablar de evaluación. Como todo, se debe aclarar lo mejor posible el concepto que se tiene por evaluación. Por tanto se construye un modelo de evaluación para dar cuenta de los resultados. Este modelo de evaluación preferentemente ha de ser concebido para obtener resultados para analizarlos  tomando en cuenta los indicadores del modelo de calidad y conocer el estado en el que se encuentran los resultados que se están logrando. Se trata de una evaluación para conocer y mejorar el proceso.

Fin de la evaluación, la evaluación debe conseguir tres cosas: hacer un diagnostico, o sea conocer el estado actual en el que se encuentra el objeto que se va a evaluar, luego darle seguimiento, seguir el proceso del fenómeno para ver cómo se desarrolla, teniendo en cuenta claro cuál es la finalidad de este seguimiento, por ultimo buscar mejorar del proceso. Al evaluación busca generar conocimiento.

Otro concepto que entra en cuestión con el propósito de conseguir una educación de calidad son los programas de evaluación en los 70 y 80. El CENEVAL por ejemplo cuya aparición fue en 1994. SE crean también instrumentos mejorados e Instituciones como el Instituto Nacional de la Evaluación la Educación (INEE). En fin empieza la búsqueda por la calidad a través de programas de evaluación.  


Comentario:
No es que estar en contra de la evaluación sea sano, de hecho no lo es. Lo insano radica en que los programas y sus instrumentos de evaluación son mecanismo de presión, son impuestos, son externos y de intereses que muchas veces no tienen que ver con educación (habría que replantearse este concepto) por tanto la evaluación se está aplicando no por convencimiento (convicción) sino por exigencia de las empresas, del Estado y de las organizaciones hegemónicas. No se alcanza una calidad educativa en estas condiciones de opresión, lo que se está haciendo es una escolarización de una loca carrera por la competición, y eso no corresponde a una educación. Las instituciones están perdiendo el sentido y están olvidando replantearse la pregunta ¿Para qué educar?  Lo que quieren es agradar a quienes proporcionan los dineros que les permiten seguir subsistiendo. Cuando la evaluación sea decisión y convicción de la institución y todos estemos convencidos de sus beneficios educativos, y hayamos respondido de manera casi unánime para que educar, entonces estaremos en condiciones de evaluar (o tal vez ni lo necesitemos).